27,5
vs 29
ANTECEDENTES
Nuevo gran dilema de la humanidad
biker... 29er -vs- 27,5er
Cuando lo que parecía la moda 29er
vino para quedarse, y muchos en los que me incluyo dábamos por
enterradas las 26er, viene un nuevo estandar, 27,5 con las virtudes
de ambas?
Para poner en antecendentes, desde
hace un par de años que probé la primera 29er, y puedo decir, que
me convenció, conseguía velocidades de crucero mucho mayores, los
baches se hacían más pequeños, la adherencia mejoraba, la
tracción... contras teóricos como la manejabilidad no se
destacaban, si bien la sensación de llevar una bici “mas grande”
te obliga a modificar ligeramente el pilotaje, no se quedaba
atrancada en las curvas ni parecido
Subiendo, mientras hay piernas se sube
perfectamente, si bien, lo he dicho siempre, la 29er es una bici más
cruel cuando “petas” ya que hace que la “petada” sea de
órdago y la menor cuesta te parezca interminable.
En definitva, sube bien, baja como un
tanque, llanea de vértigo. Contras, podemos decir que no es una bici
ágil, “viva” para poder saltar, cambiar de dirección,
acelerar... pero todo como comparativa a la rueda pequeña; de un
modo independiente, una bici de poco más de 10 kgs acelera y se
siente ágil
Con todo, me convencí de ser un
partidario 29er para un uso, rally-maratón, ya la modalidad del
Enduro y otras “gravity”, habría que dejarla para otra
exposición en las que tras probar bicis de trail, creo que son
demasiado pesadas y lentas, pero eso no está demasiado probado, ni
es el caso
Ahora bien, parece que el mercado
decide que hay una vuelta más de tuerca, entre otras cosas, algún
grande como Nino decide que las 29 no son para él, y se pone en
escena la 27.5, y si la competición sirve de alguna referencia, lo
gana todo. Yo soy de la opinión que el profesional sirve para ver
carreras interesantes, no para querer copiar nada. Las marcas mandan,
normalmente, porque con el “boom” de las 29, el caso de Nino fue
creo de los pocos que no pasó por el aro, y le hicieron una 27,5.
Como digo, para mí no vale de referencia
Parece otro marketing más, el sector
de la bici no quiere perder ingresos... pero alguna marca grande como
Giant de repente se centre casi exclusivamente en esa medida, la
apuesta parece segura. Sin olvidar otro sin fín de marcas, que han
aceptado el nuevo estandar, otros como Scott que se mantienen como
casi pioneros, salvo excepciones como Specialized (lógico entre
otras cosas tras su argumento sin marcha atrás por sólo 29)
El inconveniente de la estatura para
algunos, de la manejabilidad para otros, parece que se remedia, y que
además se consiguen las ganancias de rodaje, tracción y paso de
obstáculos...
Será verdad? Esto es más marketíng?
Pues habrá que probar, yo no opino si no lo he probado antes, puedo
valorar opiniones por lógica o no, pero opinión fundada, cuando se
prueba
Procedemos....
LAS MÁQUINAS
Ya tenemos la prueba, las dos máquinas
muy parejas aunque distintas para hacer un comparativo en
condiciones, y lo más real posible
29er. Cuadro carbono, XT completo,
Ruedas lígeras, Rock Shox Reba
27,5. Cuadro carbono, XT completo,
Ruedas ligeras, Fox Float RLC
Ligeras diferencias como tija ligera y
manillar de carbono de las 27.5 contra el aluminio de serie de las
29, y las bielas FSA de carbono de la 27.5 contra las XT de aluminio
de la 29
La báscula arroja una diferencia de
peso de +/-600 grms entre una y otra, en principio asumible casi más
a la diferencia de componentes que a sus medidas
Con la 29er ya llevamos unos meses y
sabemos de sobra sus respuestas, dentro de lo que cabe, ligera, muy
rígida, poco cómoda; una bici con la que acostumbramos a
exprimirnos e ir rápido
Ahora toca la 27.5, que de primeras,
es una bici más ligera, con la Fox delantera seguro que más cómoda
y mejor tacto, ya que las últimas Rock Shox resultan horquillas “muy
de competición” con una sensibilidad inicial ausente, pero una
buena absorción a partir de impactos de media entidad. Que aunque no
cómodo, si que resulta una horquilla muy eficiente con apenas vaivén
incluso pedaleando de pie
El desarrollo similar, más duro a
plato pero más o menos equiparable por medida, con 42/27 por un
40/28 de la 29er que en comparación hace más duro el desarrollo
corto
El funcionamiento del grupo, pues nada
nuevo que las excelencias ya conocidas del XT
Sin demasiados ajustes dejo las dos
bicis con posiciones casi idénticas, mismo sillín, mismos puños,
todo lo más parejo posible para que las diferencias a percibir sean
claras
A simple vista, el cuadro de la 27,5
también da la impresión de mostrarse rígido en la pedalada, a
pesar de que la 29 lleva rodamientos pressfit y las 27,5 los lleva
exteriores, y en la zona de las punteras, que lleva eje pasante y la
pinza de freno entre vainas y tirantes, mientras que la 29 mantiene
configuración clásica de eje estandar y pinza sobre tirante en una
zona con refuerzo de aluminio
Las cubiertas, distintas, en principio
no deberían ser una diferencia destacable, Schwalbe Racing Ralph
29x2.10 contra Geax Saguaro 27.5x2.00 se presentan como cubiertas
rodadoras, ligeras y con un comportamiento mixto aceptable según el
taqueado
Así presentadas, toca dar pedales por
la habitual sierra de Hoyo de Manzanares, con diversidad de pistas,
senderos, rocas y trialeras para elegir
MES 1
SALIDA 1 (27,5)
Comenzamos la prueba con la 27.5 ya
que partimos de la costumbre a la 29er
Las primeras sensaciones son buenas,
una bici que se nota “más pequeña y reactiva” pero en la que
mantenemos una posición habitual que no resulta extraña ni incómoda
Los kms iniciales son de pista rápida
de vía pecuaria, donde en teoría tiene la ventaja la 29er, pero con
la 27,5 no notamos la sensación de “ir parados” como cuando
pasábamos de la 29 a la 26, de hecho, sin ningún instrumento de
medición, da la impresión de mantener igual de bien la velocidad de
crucero y algo más ágil a la hora de sortear piedras y charcos, y
sobre todo gran diferencia a la hora de realizar un “manual”, un
“bunny” o un salto en los que la 29 se muestra siempre perezosa
Ante la primera insinuación a los
pedales, la bici sale disparada, la capacidad de aceleración resulta
casi sorprendente, si bien es cierto, que una bici que baja de 10 kgs
siempre es más agradecida en estas actuaciones
Comienza la primera subida larga y
dura, la impresión es de ir más “ligero” que con la 29, aspecto
que puede ser favorecido por los desarrollos, y que no constatamos
con mediciones, pero parece que se corona, o más rápido o menos
castigado
Luego viene la primera parte de la
bajada por pista ancha y rápida, y no se echa de menos las 29” ya
que la bici baja con el mismo aplomo, e incluso se nota más cómoda,
en la parte delantera ya contábamos con ello por la horquilla Fox,
pero la trasera también dulcifica el terreno
Llegamos a los senderos revirados en
bajada, rápido y con curvas de adherencia cuestionable según la
climatología. Se desenvuelve más ágil a cualquier insinuación si
bien se pierde el aplomo y la seguridad que da la rueda grande. El
paso por curva rápida no se consigue igual, aunque un error de
trazada es más fácilmente solucionable con un cambio de dirección
más rápido y agil
En la zona de toboganes de piedras
rotas y losas de piedra, aunque es más fácil arrancar o ponerse de
pie para pasar una zona dura, la adherencia se ve mermada, en las
losas de piedra no se muestra tan segura, y sobre todo en subidas
trialeras de falta de tracción, la rueda patina antes
Una nueva subida, primero con tramo de
sendero, luego carretera y de nuevo sendero, nos confirma que la bici
sube muy ágil, y como dijimos antes, con la sensación de gastar
menos o incluso ir más deprisa
Llega una nueva bajada más técnica,
sendero revirado, escalones de piedra, y variedad a velocidad
cambiante. Los escalones de piedra los afronta con solvencia, si bien
no con la comodidad o facilidad de las ruedas grandes, pero haciendo
su función a la perfección y sin ningún susto. Cuando la bici se
lanza, pierde un poco la seguridad y aplomo de la rueda grande, nada
realmente destacable, pero si perceptible. Sin embargo a la hora de
tener que superar cualquier obstáculo con un salto, bunny o similar
si que se muestra mucho más ágil y reactiva
La ruta sigue alternando zonas
parecidas, y las sensaciones se confirman. Una vez llegados a
destino, la impresión es “de haber ido como un tiro” y que la
bici no tiene nada que envidiar a las ruedas grandes. Pero puede ser
efecto placebo, hay que probar más a fondo
SALIDA 2 (27,5)
Un par de días después, de nuevo
ruta (prácticamente igual, con variantes, pero por la misma zona y
tipo de terreno) y se confirman las sensaciones del primer día.
Algo más hecho a las reacciones de la
bici, nos sentimos cómodos, y ajustamos la conducción conscientes
de la nueva medida
Nada nuevo que aportar, de nuevo
llegamos con la sensación de haber volado por los caminos
Mañana día de 29 para comparar
SALIDA 29
Si bien el final de la semana lo
solemos notar, y el cansancio hace mella, volvemos a las ruedas
grandes
En las zonas de rodar, vamos ligeros y
con buena velocidad de crucero, como siempre. Pero no se nota la
diferencia abismal que notamos cuando pasamos a las ruedas grandes
desde las 26, de hecho diría, que sin medición de velocidad, la
sensación es ir igual de deprisa
En los primeros repechos rápidos, se
sigue rápido, pero a la hora de arrancar, se nota o da la impresión
de que cuesta más o que tardamos más, una vez lanzados ya está
hecho, pero esos primeros metros se muestran más perezosos
La subida larga y dura, comienza bien,
si mostrar gran diferencia (mientras no se quieran hacer arrancadas,
que hay la ventaja está decantada para la rueda pequeña) pero según
se va avanzando y llegando al final, parece que cuesta más y
llegamos con más fatiga
Tenemos en cuenta, que es un día más
cansado, y las sensaciones pueden ser más fruto de la realidad del
cansancio que de la bici en sí
La bajada por pista, velocidad y
aplomo, como siempre, pero aseguraría que no sacaríamos mucha
ventaja a la pequeña
Zona revirada y sendero de bajada.
Cómodo por la estabilidad y seguridad de siempre, en las curvas más
cerradas, se nota la diferencia de agilidad, pero por contra, la
adherencia es superior
Las zonas de roca y losas, se confirma
la adherencia y seguridad de la grande que pasa como si nada; y en
las trialeras de subida como la tracción no tiene fin, todo se sube
y todo se pasa. En este punto si habríamos dejado a la pequeña
atrás
La nueva subida vuelve a dejar de
manifiesto el cansancio, no saco más conclusión por el día que no
es más “fino”
Y llegamos a la bajada técnica.
Confirmando sensaciones de que los escalones son más pequeños y la
bici tiene más de aplomo, pero realmente, la sensación es que
llegaríamos al final a la par
Llegamos con más cansancio, pensando
que para que 29 si tenemos 27,5...
SALIDAS SIGUIENTES Y DIVAGACIONES
En sucesivas semanas y días de
salidas, consecutivos y alternos, decidimos ir cambiando. Para
compensar sensaciones con cansancio, la semana siguiente salimos con
la 29 los días “frescos” y con la 27,5 los días cansados
Vamos variando rutas, aprovechamos los
cambios de terreno por las lluvias y seguimos haciendo reflexión de
sensaciones, ya que no seguimos ni usamos ningún dispositivo que nos
mida tiempo ni velocidades, puede que para el mes 2 decidamos
utilizar ya las mediciones y datos para sacar las conclusiones
finales y más definitivas
Si bien con el paso de los días, ante
la cuestión de cual elegir, no se saca nada en claro, por suerte no
estoy obligado a elegir, y pienso que durante el año y las
competiciones una u otra se decantará, o quizá según el circuito
resulte mejor una u otra...
Lo que está claro, es que siendo muy
partidario de las 29er como era, ahora puedo decir tras probar, que
estoy totalmente convencido que las 27,5 funcionan.
Como lo decía de las 29er, no hay
panacea, se avanza dando pedales y estos los impulsan las piernas; y
por supuesto, no hay una verdad absoluta, cada uno tenemos nuestra
visión, gustos y preferencias. Para unos las 26 siguen siendo lo
mejor, otros no se bajan de las 29, y yo por ejemplo me subo en lo
que me dejen, y al final “me gustan todas” y elijo lo que mejor
me va según uso
Hace un año, mis rutas diarias eran
“pisteras”, y ahí no hay duda, que la 29 al final saca ventaja.
Por suerte ahora puedo disfrutar de una zona mucho más atractiva y
rica en senderos, piedras y variantes que elegir, y hasta he vuelto a
apreciar la doble suspensión (29) pero al final siempre vuelvo a la
rígida
Pero en definitiva, donde más he
notado la diferencia, ha sido en las zonas técnicas, tanto de subida
como de bajada, en las que la rueda grande me sigue pareciendo
ventajosa, por tracción, capacidad de superar obstáculos, seguridad
y estabilidad
En cuanto a la exigencia física, está
claro que una rueda más grandes requiere un empuje mayor, y quizá
por eso mi percepción de mayor gasto, ya que la impresión es que
llevo los mismos desarrollos con una que con otra, lo que haría que
en la 29 consiga mayor avance a mayor gasto. Realmente haría falta
una medición para llegar a comparar estos aspectos, en este caso las
sensaciones siempre pueden engañar
Vamos, que en general pienso muchas
cosas, pero ninguna clara. Espero que lleguen las primeras
competiciones y testar una y otra e intentar sacar conclusiones
Si ahora mismo tuviera que elegir y
quedarme sólo con una de ellas, creo que me quedaría con la 29,
aunque quizá porque es a lo que me he acostumbrado o porque para mí,
le encuentro unas pequeñas ventajas, en zonas técnicas y velocidad
que aunque mínimas, me podrían hacer decantar la balanza
CONCLUSIONES (RELATIVAS) MES 1
Las 27,5 funcionan, y muy bien, de
hecho, podría llegar a decir que son como una 26, ágil y reactiva,
pero con mayor capacidad de rodar y pasar obstáculos (cercano a la
29)
Las 29 siguen siendo superiores en
velocidad, adherencia y paso de obstáculos
En un resumen simplista, diría, que
para sitios técnicos, va mejor la 29 por su mejor paso de obstáculos
y estabilidad; pero físicamente lastra algo más. Para arrancadas,
subidas cortas, o incluso largas... mejor la 27.5, más ligera aunque
en según que circunstancias es una bici más nerviosa
Algo así como, Técnica => 29
Física=> 27,5
La diferencia de peso puede hacerse
notar en detrimento de la 29, ya que donde si he notado cierta
ventaja de la 27,5 a la 29 es en el aspecto físico, próximamente
intentaremos rasparle unos gramos a la 29 y dejarlas en peso más
parejos
Por supuesto dependerá del tipo de
ruta y terreno de cada uno, y de como se adapta cada cual a la bici.
En mi caso, creo que bajando de peso la 29, le seguiré encontrando
más ventajas, a pesar de que la 27,5 me está gustando y mucho
Así que lo dicho, conclusión?
ninguna definitiva.
Las dos semana anteriores no habían
sido muy buenas, entre el catarro, el tiempo y las obligaciones,
habíamos cogido la bici menos de lo deseado, así que sabía que
llegaría muy falto de punto e intensidad, pero con muchas ganas de
disfrutar, sin duda
Se iban alternando zonas de piedra y
pradera, con más o menos agua, para acabar llegando a la calleja de
sobra conocida que une con Collado Mediano, primero de subida para
girar 180ª y enfilar para abajo camino a meta, con muchas trazadas a
elegir, entretenido y divertido. Este año nos hacían pasar por el
pueblo para disfrute del aficionado, sin duda un acierto para todo el
que se acerca a verlo
Cuarta vuelta, me pasa el primero,
casi no puedo hacer ni intención de seguirle. Al poco el segundo y
un poco más de lo mismo, me da que me he fundido, pero aguanto
razonablemente. A mitad de vuelta, ya tengo al tercero que me
adelanta, le sigo levemente, pero se me sale la cadena por fuera del
plato, bueno, ya le he perdido, confiaba en adelantar en la bajada. Y
encima se acerca un cuarto... pufff... Con la cadena en su sitio,
reinicio delante de él, y en las zonas técnicas le cojo algo de
ventaja. Sin duda agradezco la 29, para las zonas técnicas como
siempre, pero más cuando ya vas tan castigado que la pericia se ve
tan mermada. En la última zona de la calleja, le tengo muy cerca
mientras subimos, pero en cuanto empieza la bajada, le distancio y le
pierdo. Ya me puedo relajar, llego a meta soltando. 23º M30
