Tocado y hundido, así podría resumir
mi segunda prueba de Xc de este año
Ya después de Navalagamella tuve una
semana de bajón y parón absoluto, confíaba en haber retomado el
buen camino pero no fue así, fue mucho peor
La misma mañana de la carrera, no me
sentía “fino” de hecho, iba con cierta desgana, y eso no es nada
normal ni habitual, puedo estar más o menos cansado, según la
carrera más o menos motivado, pero era de esos días en lo que te
planteas pórque te gusta competir, cuando puedes tomarte la bici de
una manera mucho más ociosa... en fín, que no íbamos muy allá
Ya que el horario de estas carreras nos
respeta las horas de sueño, nos deja dormir y que se vengan las
nenas a la carrera, para aprovechar y pasar la mañana. Nos
presentamos en Villa del Prado con una hora de margen para recoger
dorsal, preparar y dar una media vuelta de reconocimiento
El circuito no presenta dificultad
especial, la primera parte más suelta y seca, con porcentajes de
subida y bajada, la segunda bajada con mucha piedra, muy divertida,
con trazada segura o trazada rápida. En general un circuito
atractivo y del que poder disfrutar, y por supuesto sufrir
Las sensaciones calentando, ni buenas
ni malas, más bien ausentes. Si es cierto que el sábado estuvo
rondando la sierra algo más de dos horas, y llegué a casa bastante
más cansado de lo habitual, para haber salido a rodar sin
pretensión. Unido a la cierta pereza y desgana, no eran los mejores
augurios
Se forman parrillas, detrás de los
élite. No está mal, una tercera-cuarta línea de salida, como
siempre con mucha afluencia la categoría M30
Salida rápida, pista ascendente que va
cogiendo desnivel, en teoría un tipo de salida que me vendría bien,
pero ya en la salida, veo que me pasan uno, y otro, y otro... bueno,
no siempre se sale bien. De hecho se forma una montonera en la subida
que provoca más de una tensión
Se hacía un bucle a vista del público,
sube y baja, zigzageo propio del ciclocross, y vuelta a subir. En los
primeros compases intento mantenerme en posiciones, apretando lo que
doy de sí, que voy viendo que no es mucho
El goteo de corredores que me va
pasando y que no puedo seguir tiende a ser preocupante, más siendo
la primera vuelta. Pero decido no obsesionarme y buscar sensaciones.
Nunca llegué a encontrarlas, por mucho que quise buscar
Subida larga, bajadas sueltas, con
algún paso de afinar un poco la trazada para no salir por donde no
debo, de hecho, en una bajada, el corredor que me precede se equivoca
de trazada y yo tiro recto monte abajo, que desastre! Bajo de la bici
y otra vez para arriba a coger el circuito
Veo que voy anormalmente rezagado, debo
andar más allá de puesto 30 y casi 40. Planteo intentar ir
remontando y ver si puedo ir de menos a más. Pero iría de menos a
menos y mucho menos
Tras el primer bucle, se cambia de
monte para iniciar las segunda parte, una subida al principio muy
tendida de darlo todo y una segunda con más desnivel y un paso final
de bajar de la bici para posteriormente afrontar el descenso
divertido de las piedras
No hay manera de progresar, la
sensación es la falta de sensación, no tengo piernas, pero ni
siquiera me noto cansado, ni subo el pulso, ni aprieto ni soy capaz
de exigirme más
La carrera se me está haciendo ya muy
larga en la primera vuelta. Comienzo la segunda ya sin cabeza,
pensando porque no ando, que no he recuperado, que vaya día después
de haberme traido a las nenas, en fín, deambulo por el circuito, en
posiciones muy retrasadas, sin recuperar puestos, salvo de los
cuantos corredores que veo fuera del circuito por avería o caída
Hay un grupo delante que no termina de
irse, pero tampoco soy capaz de cogerlos, ni me encuentro con ganas
sinceramente
Sigo en el circuito como un autómata,
como el que hace por hacer, pero recuerdo las palabras de un
compañero de una mala carrera, si no lo disfrutamos, qué hacemos
aquí? Y eso era lo que que se me pasaba constantemente por la
cabeza, lo más que me entretenía era la bajada de piedra, pero que
incluso dada la falta de concentración, me limitaba a hacerlo por la
trazada segura sin apretar lo más mínimo
Por el ritmo que llevo, calculo que en
la tercera vuelta me pueden doblar los primeros élite, y tras los
pocos primeros siempre llegan los primeros M30. Así que aflojo
incluso un poco más, si me doblan, acabo vuelta y acabo carrera.
Para casa que es lo que toca
Pero tardarían más de la cuenta en
llegar a doblarme, dejo pasar a Pedro Romero en la bajada y me dejo
caer, solo justo antes de meta me pasa el segundo elite, pues no me
ha salido la jugada
Sigo, hago el bucle hasta que veo a mis
nenas, y le pregunto a mi mujer, que si nos vamos ya, que es tarde.
“tu mismo, para lo que estás haciendo...”
Pues me bajo, no tiene sentido seguir.
Es la segunda vez que me retiro de una carrera, no es propio en mí,
pero veía que seguir era empeorar las sensaciones, además de hacer
la vuelta a casa tardísimo
Ni he llegado a cansarme, una sensación
que nunca había tenido, físicamente mal, pero mentalmente peor, que
es lo más preocupante. Ahora toca reflexionar y replantear lo que
queda de año
De momento la semana que viene 3ª
prueba XCM en Robledo de Chavela, ya estaba apuntado, así que no me
planteo no ir, pero desde luego va a tocar ir a disfrutar de las
vistas y espero que del circuito que no conozco
Abril veremos que toca, pero
probablemente toque descanso y dejar de correr un par de carreras por
lo menos, ya veremos...